China

No solo es un país, es la cuna de una de las civilizaciones antiguas más magníficas del mundo. China es un sitio con magia, historia y movimiento, que ofrece tanto novedad, como tradición en cada rincón.

  • Continente: Asia
  • Clima: Variado. Muy frío en invierno y templado el resto del año.
  • Visa: Necesaria para mexicanos
Continente

Asia

Clima

Variado. Muy frío en invierno y templado el resto del año.

Visa

Necesaria para mexicanos

Descripción

Siendo uno de los países más grandes en cuanto a territorio y población, China alberga las más modernas ciudades con rascacielos e impresionante desarrollo industrial. Sin embargo también resguarda los sitios más escondidos, con templos que datan de imperios casi desconocidos.

China ofrece gran variedad de paisajes, climas e influencia de otras civilizaciones, lo que se refleja en una rica arquitectura entre la que destaca la Gran Muralla China. La última es solo una muestra de la genialidad de esta cultura milenaria, que hacen de este país un sitio obligado para quienes quieren descubrir la grandeza del mundo desde sus inicios.

Beijing

La segunda ciudad más poblada de la China (13 Millones de Habitantes contra los 14 Millones de Shanghai) el Nuevo Beijing ya no es una ciudad de belleza clásica, pero su extraordinaria historia le ha conferido una cierta generosidad, y no hay duda alguna de que eso impresiona.
La ciudad Prohibida, una de las estructuras arquitectónicas más magníficas del mundo, sigue siendo una imprescindible visita que no te puedes perder.

Sitio de interés

La Gran Muralla China. Es un símbolo de la genialidad China. Aunque data de la dinastía Ming, en su construcción participaron por lo menos 20 estados y dinastías en un período de 2,000 años, siguiendo diferentes prolongaciones de construcción según las necesidades.

El Templo del Cielo. Construido en 1420, formó parte de la ciudad durante la dinastía Qing, cuando los manchúes ampliaron la ciudad. El templo más famoso de la China se yergue dentro de un parque de 270 hectáreas y está rodeado por una muralla cuyo tramo norte es redondeado (el cielo) y cuya mitad sur es cuadrada (la tierra).

El Palacio de Verano. Data de fines del siglo XIX, ya que fue reconstruido tras haber sido devastado en 1860 por ingleses y franceses. Se volvió a destruir en 1900 y reconstruir en 1902. El resultado es lo que vemos hoy, un clásico jardín chino.